El mensaje de descontento se trasmite con una honestidad y crudeza que es, en parte, lo que más valor inyecta a la literatura en construcción contenida en este apasionante libro de relatos. Son cinco cuentos entre los que destaca la frescura del primero, Lluvia ligera, con soldados chistosos que recuerdan a los de la película 1941, y la madurez del último, La integración secreta. Aunque no es su mejor libro, por lo que dicen algunos y asegura el propio autor; atrae el humor de Pynchon, los diálogos divertidos, los personajes estrafalarios y su intento de cultivar diferentes géneros (véase el cuento Bajo la rosa, de espionaje). En la extensa introducción, Pynchon destripa los errores de estos relatos, sus fallos como escritor novel y su manía juvenil de documentarse más con lecturas que con experiencias. Y por supuesto reconoce su deuda con los beat: considera En el camino, de Jack Kerouac, una de las grandes novelas norteamericanas .
