Los autores, destacan que los ayuntamientos son una de las principales instituciones sociales y políticas de México, formados constitucionalmente a principios del siglo XIX, conforme a las disposiciones de la Constitución de Cádiz, que rompían con el sistema de privilegios del antiguo régimen. En los municipios se fueron mezclando prácticas corporativas y principios de la doctrina político — filosófica liberal. Señalan que a partir del México independiente se inició la construcción de un nuevo gobierno nacional y local para impulsar al municipio como una institución necesaria con permanencia en las diferentes formas de gobierno del México decimonónico: monarquía moderada, república federal y república central. De ahí la intervención del nivel municipal en los principales acontecimientos políticos nacionales, regionales y estatales durante los siglos XIX y XX y hasta la actualidad. Enfatizan que los municipios, abordados en este libro colectivo pertenecieron a la estructura política social de Nueva España, del México decimonónico y de las primeras décadas del gobierno posrevolucionario y constituyen una muestra del complejo mundo de relaciones desarrolladas en el primer nivel de gobierno, el municipal, y en la base de la organización social, descubriendo comunidades vivas y diversas, características que instituyen las raíces históricas de los municipios actuales del Estado de México y de Oaxaca. Finalmente, en cada capítulo del libro, los autores dejan constancia de que el gobierno municipal forma parte de la complejidad social establecida en su territorio con sus contradicciones y conflictos. Hacen hincapié en que la relación entre ayuntamiento y sociedad es un proceso permanente con profundas raíces históricas. El estudio del municipio es un compromiso con el análisis de múltiples variables que se entrecruzan, porque como institución y base social el municipio es dinámico contribuyendo así a forjar una nación en constante movimiento.
