El término “big data” no solo hace referencia a la existencia de grandes cantidades de datos, sino a la forma de recopilarlos, manejarlos y analizarlos. El objetivo de esta técnica es identificar patrones para proponer hallazgos con mayor certidumbre y de manera eficiente.
Javier Figueroa Castellanos explica por qué el futuro de la criminología está vinculado con esta perspectiva tecnológica. El autor, luego de desarrollar una aproximación conceptual y legal del tema, explica cómo es que los fenómenos actuales sobre criminalidad pueden ser analizados a través del big data para detectar causas y consecuencias del comportamiento humano.
Pero el autor va más allá de la dimensión teórica: utiliza el caso de la incidencia delictiva en México para poder entender, a través de datos concretos, la utilidad de su propuesta. Aquellos interesados en el uso de las nuevas tecnologías en disciplinas de las ciencias sociales, como la criminología, encontrarán en esta publicación una invitación a utilizar los datos para tratar de entender la realidad.