La educación a distancia es una estrategia educativa basada en tres pilares fundamentales: el uso de tecnologías diversas; procesos operativos flexibles en lo que se refiere al manejo de tiempos y espacios y métodos didácticos/pedagógicos orientados a estimular la producción de conocimiento reflexivo y la autonomía de los aprendices. En este contexto cobra gran importancia la relación con los otros, relación que muchas veces resulta determinante para sortear con éxito los obstáculos que se van presentando.
El libro remarca entonces la insoslayable necesidad de humanizar los procesos y actividades desarrolladas en estos espacios soportados tecnológicamente ya que se considera que las tecnologías mediadoras no son inocuas ni neutrales Por ello, el factor humano, la actividad de las personas, la mirada crítica y reflexiva permite un aprovechamiento adecuado de las posibilidades que las tecnologías entrañan sin descuidar las necesidades de los alumnos y la relación que se establece entre todos los que participan del proceso pedagógico.