Las ideas, críticas, esperanzas y angustias transhumanistas son culturalmente omnipresentes. La noción central de mejoramiento/aumento de las capacidades humanas no es nueva, lo nuevo en el trasegar del transhumanismo es que de la medicina a la robótica, de las biotecnologías a las ciencias cognitivas, de las nanotecnociencias a la astronáutica, se conocen cada vez más esbozos de concreción.
Estos avances tecnocientíficos proyectados para continuarse indefinidamente en el porvenir, son los que provocan la reflexión filosófica, ética, política, y le conceden su peso y seriedad.