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Marina Yuszczuk

Para que sepan que vinimos

  • cataimil034idézett16 nappal ezelőtt
    inquietud no cedía pero la certeza de lo que había visto sí, se volvió más lejana, y un largo rato después pudo abrir los ojos y verificar eso que apenas la aliviaba: que no había nada en el vidrio.

    En las horas siguientes trató de dormir, y cuando no dormía trataba de convencerse de que estaba equivocada, de que había una continuidad entre los sueños, los pensamientos pesimistas de los días anteriores y lo que había visto en la ventanilla. Le costó tomar la decisión de abandonar el asiento para ir al baño. Le temblaron un poco las manos cuando entró y cerró la puerta a sus espaldas, cuando se quedó a solas con el espejo en ese cubículo de plástico, con el rugido bajo sus pies, que no se detenía ni por un segundo y le hacía sentir que las
  • cataimil034idézett16 nappal ezelőtt
    quietud no cedía pero la certeza de lo que había visto sí, se volvió más lejana, y un largo rato después pudo abrir los ojos y verificar eso que apenas la aliviaba: que no había nada en el vidrio.

    En las horas siguientes trató de dormir, y cuando no dormía trataba de convencerse de que estaba equivocada, de que había una continuidad entre los sueños, los pensamientos pesimistas de los días anteriores y lo que había visto en la ventanilla. Le costó tomar la decisión de abandonar el asiento para ir al baño. Le temblaron un poco las manos cuando entró y cerró la puerta a sus espaldas, cuando se quedó a solas con el espejo en ese cubículo de plástico, con el rugido bajo sus pies, que no se detenía ni por un segundo y le hacía sentir que las
  • Edith Arjonaidézett5 hónappal ezelőtt
    De que existía esa abertura.
  • Jaziidézettelőző év
    había otra cosa que no la abandonaba y a la que ella había llamado “dolor” durante demasiado tiempo
  • Jaziidézettelőző év
    tema es reconocer cuándo y en qué nos hicimos daño en nuestra niñez y juventud –nos hicimos, no nos hicieron–. Luego pedirnos perdón, reconciliarnos con nosotros, perdonarnos, así no merecemos ser castigados.
  • Jaziidézett2 évvel ezelőtt
    No para ella: para la casa. Porque la casa y ella eran lo mismo
  • Jaziidézett2 évvel ezelőtt
    negrura sobre negrura, sin límites
  • Jaziidézett2 évvel ezelőtt
    Cómo le iba decir que para ella el tiempo se había detenido, o que pasaba muy distinto?
  • Montserrat Zamora Villaidézett2 évvel ezelőtt
    A veces su preocupación no tenía ninguna forma concreta, era solo una sensación de peligro, la idea primitiva de que si se alejaban de casa quedaban a la intemperie, cuando lo cierto era que todo lo malo les había pasado dentro de la casa, o por lo menos de la familia.
  • Montserrat Zamora Villaidézett2 évvel ezelőtt
    sintió, como siempre, que todo se ordenaba alrededor de una única certeza: la amaba. La quería. Había deseado tenerla y aún quería.
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