La ciudad de los ricos y la ciudad de los pobres

A finales del siglo XX se plagaron de zonas industriales y de infraestructuras abandonadas y se convirtieron en las partes de la metrópoli donde más se concentra el desempleo y la pobreza.

Milán se caracteriza, en cambio, por una “geografía molecular”24 con las zonas más pobres y de vivienda pública dispersas en el territorio metropolitano.

el Gran París se ve más bien como un caleidoscopio de enclaves que no puede ser reducido a imágenes simples, mucho menos a la imagen de un centro uniformemente rico y una periferia uniformemente pobre.

En el imaginario parisino los ricos viven en el sur-oeste, en barrios “tipo Luxembourg”, y los pobres al noreste, en barrios como “La Courneuve

el Gran París, se convirtió cada vez más, a partir de la segunda mitad del siglo XX, en una ciudad de enclaves. Olvida tener en su propio centro la ciudad de los passages, el Gran París no es una ciudad porosa22

En esta situación, las políticas urbanas en Amberes han tratado de reaccionar, por ahora con éxito, sobre todo, a través de la creación de espacios y equipamientos públicos21; realizaciones que han desencadenado procesos de recuperación de las zonas más pobres de la ciudad: un poco de gentrification, impulsada por parejas jóvenes con altos niveles de educación y rentas medio altas, los hijos de los que habían abandonado la ciudad por el campo y que consideraban vivir en la dispersión poco estimulante; frecuentación de los nuevos equipamientos y espacios públicos por parte de toda la población, ricos y pobres juntos; construcción de las condiciones de “porosidad” de la trama urbana dentro de la cual se pueden producir y se pueden impulsar procesos de “percolación” mutua de los diferentes grupos sociales

Al final del siglo, algunos observadores han creído poder sostener que las ciudades se han convertido en suburbios y los suburbios en ciudades18

Durante su larga historia, el suburbio estadounidense se ha transformado en sus ca­­racterísticas fundamentales y en su extensión; de forma análoga, han cambiado tanto los principales actores in­­volucrados, ya sea desde el lado de la demanda o desde el de la producción, como sus motivaciones, y esto ha dado lugar a situaciones muy diferentes entre sí y no reconducibles a un único modelo14.

aunque en el fondo esté “el sueño de la casa como imagen específicamente americana”, cuando “por primera vez en la historia una civilización construye un ideal utópico basado en el hogar en lugar de en la ciudad o la nación

La dispersión en la ciudad difusa europea, como en la North-Western Metropolitan Area, es, sin embargo, diferente del sprawl de los suburbios estadounidenses.