Qué pendeja. Quedan muchas cervezas por tomar, muchos cigarros por quemar, muchas lágrimas por llorar. ¿Dónde quedó la niñez, Leticia? No la veo por ningse apagó. Estoy fumando Delicados. No he comido, no tengo dinero, y estoy más borracha de tristeza que de alcohol. Solo añoranza de otros tiempos, de las tardes soleadas, del polvo, de las vacaciones del verano. Estoy sola, terriblemente sola, ¡de qué manera el tiempo nos vuelve monstruos!
Fui por otra cerveza y se me fue el avión.